Cruyff, ‘El Flaco’
“El Flaco” nació en Ámsterdam, la capital de Holanda. La reina Guillermina, en 1947, en honor al coraje de la ciudad durante la Segunda Guerra Mundial denominaría la ciudad, dividida por un gran rio, como la ‘Heroica, resuelta y misericordiosa’. Johan, como si llevara ese eslogan a cuestas con apenas 17 años debutaría en el Ajax F.C y acompañado de su delgadez, elegancia y agilidad, ayudaría al equipo a conseguir seis títulos de Liga y tres copas de Europa.
Su irreverencia arribó a Barcelona en el 73. Siempre supo que la fortaleza física del Barca no era la mayor cualidad del equipo, por eso, mientras fumaba un cigarro en el entretiempo de algún partido, que hoy lastimosamente le pasan factura, arengaba a todos para que tocaran la pelota rápido y se desmarcaran. Para eso se necesitaba técnica y talento; hoy sería muy difícil pensar en esas dos características y dejar a Johan Cruyff por fuera.
El chico que por un contrato publicitario con la marca Puma usó una camiseta con sólo dos rayas, en Alemania 74, cuando el resto de sus compañeros llevaban las tres rayas de Adidas, ostenta la medio bobadita de ser elegido el mejor futbolista europeo en tres ocasiones (1971, 1973 y 1974).
Comandó la famosa ‘Naranja Mecánica’, dirigida por don Rinus Michels. Para muchos la Holanda del 74 expuso una de las mejores versiones de eso que llamamos fútbol: “El fútbol total” donde los once jugadores participaban tanto de labores defensivas como ofensivas, logrando que el equipo funcionara como una maquina locomotora, bien engranada.
La tarde del 7 de julio de 1974, ante 78200 espectadores que abarrotaban las graderías del Estadio Olímpico de Múnich, La Naranja Mecánica veía cómo, después de desperdiciar varias opciones de gol, su Fútbol Total era superado por el Fútbol Práctico de los alemanes. Antes de finalizar la primera etapa del partido los germanos estaban arriba del marcador con un 2-1 sellado por Mueller que con ese con ese tanto se convertía en el máximo goleador en la historia de los Mundiales con 14. Final del partido. Alemania Federal Campeona. Beckenbauer levanta la Copa y Cruyff se va a casa como el mejor jugador del Mundial pero Holanda se queda segunda.
“El Flaco” nació en Ámsterdam, la capital de Holanda. La reina Guillermina, en 1947, en honor al coraje de la ciudad durante la Segunda Guerra Mundial denominaría la ciudad, dividida por un gran rio, como la ‘Heroica, resuelta y misericordiosa’. Johan, como si llevara ese eslogan a cuestas con apenas 17 años debutaría en el Ajax F.C y acompañado de su delgadez, elegancia y agilidad, ayudaría al equipo a conseguir seis títulos de Liga y tres copas de Europa.
Su irreverencia arribó a Barcelona en el 73. Siempre supo que la fortaleza física del Barca no era la mayor cualidad del equipo, por eso, mientras fumaba un cigarro en el entretiempo de algún partido, que hoy lastimosamente le pasan factura, arengaba a todos para que tocaran la pelota rápido y se desmarcaran. Para eso se necesitaba técnica y talento; hoy sería muy difícil pensar en esas dos características y dejar a Johan Cruyff por fuera.
El chico que por un contrato publicitario con la marca Puma usó una camiseta con sólo dos rayas, en Alemania 74, cuando el resto de sus compañeros llevaban las tres rayas de Adidas, ostenta la medio bobadita de ser elegido el mejor futbolista europeo en tres ocasiones (1971, 1973 y 1974).
Comandó la famosa ‘Naranja Mecánica’, dirigida por don Rinus Michels. Para muchos la Holanda del 74 expuso una de las mejores versiones de eso que llamamos fútbol: “El fútbol total” donde los once jugadores participaban tanto de labores defensivas como ofensivas, logrando que el equipo funcionara como una maquina locomotora, bien engranada.
La tarde del 7 de julio de 1974, ante 78200 espectadores que abarrotaban las graderías del Estadio Olímpico de Múnich, La Naranja Mecánica veía cómo, después de desperdiciar varias opciones de gol, su Fútbol Total era superado por el Fútbol Práctico de los alemanes. Antes de finalizar la primera etapa del partido los germanos estaban arriba del marcador con un 2-1 sellado por Mueller que con ese con ese tanto se convertía en el máximo goleador en la historia de los Mundiales con 14. Final del partido. Alemania Federal Campeona. Beckenbauer levanta la Copa y Cruyff se va a casa como el mejor jugador del Mundial pero Holanda se queda segunda.
